El pasado domingo 5 de abril, se publicaba en el especial de Economía y Negocios de El Heraldo de Aragón la siguiente noticia sobre la Economía del Conocimiento.

Al leer el titular me pareció muy positivo que el hecho de que esta crisis está dando paso a un nuevo tipo de economía comience a aparecer en la prensa, puesto que lo queramos o no, los medios tradicionales siguen siendo aquellos que comunican a la Sociedad (aunque muchos sectores llevemos usando esta terminología algún tiempo). Además, se trata de un titular bastante radical “Nadie se ocupa de la Economía del Conocimiento”. Nadie hasta el momento ha explicado a aquellos los que están sufriendo la crisis, sectores industriales, que el valor va a comenzar a posarse sobre otros sectores.

Volviendo al tema de la noticia (os recomiendo que la ampliéis y le echéis un vistazo). En una primera impresión… ¿no véis algo raro? ¿por qué esa imagen de un mendigo?¿o es más bien un cubano tomando el Sol? Desde luego luego dentro de todo el tipo de imágenes que podrían haberse elegido, esta no plasma el sentimiento de renovación económica y social que debería plasmar el artículo… (si, podemos pensar que puede tratarse de alguien sin trabajo cuyo valor está siendo desaprovechado y que es una situación que va a cambiar en la Economía del Conocimiento, puesto que el valor va a estar en las personas… pero un poco confuso, ¿no?).

La noticia dice textualmente:

“Los nuevos empleados deberán tener competencia tecnológica, autonomía, pensamiento crítico, imaginación, voluntad de trabajo en equipo y hablar idiomas”

Me llama la atención que en todo momento el autor habla en tiempo futuro; lo cual da la impresión que vaya a ocurrir dentro de varios años cuando este cambio se está produciendo desde hace varios años en nuestras empresas y organizaciones.

“Los servicios se selección de recursos humanos saben ya que los nuevos empleos requerirán otras capacidades”. Y no tan nuevos empleos, son valores que van a comenzar a tenerse en cuenta en cualquier puesto de trabajo, no creo que sean nuevos empleos. Si, con una economía en la que el peso recaerá en otros sectores, sin duda, van a aparecer nuevos puestos de trabajo.

“Es tal la aceleración que sufre la humanidad que dentro de una década, la industria tradicional habrá desaparecido o estará camino de ello”. No se moja mucho con los plazos… Considero que no es que la industria tradicional vaya a desaparecer totalmente, puesto que hay profesiones imprescindibles que deben continuar; pero es cierto que el peso de la economía va a comenzar a reposar en otros sectores más creativos…

“La salida de la crisis monopoliza las preocupaciones y las propuestas sin pensar que cuando salgamos de ella nos encontraremos con un mundo cambiado para el que no valen las recetas formativas obsoletas, alguna de las cuales nos ha llevado al cabo” “En estas nuevas aptitudes, España ocupa puestos de cola”. En este punto estoy de acuerdo con los comentarios del autor… pero nunca entenderé porqué tanta paja para decir que la Educación tiene que sufrir también un proceso de desarrollo paralelo al que está sufriendo la Sociedad actual…

“Los recursos a invertir no se encontrarán en los bancos sino en las universidades y centros tecnológicos, y consistirán en conocimientos que en ellos haya despositado un eficiente sistema de educación ciencia-investigación-tecnológica”. Los estudiantes deben salir preparados para asimilar que cada vez la importancia del conocimiento, investigación y tecnología… No se hasta que punto el Sistema Educativo debe depositar los conocimientos como tal…

Siguiendo lo que leí el otro dia de Ferrán Ramón-Cortés “Dale pescado a un hombre y comerá un día. Enséñale a pesar y comerá todos los días”. Los estudiantes deben aprender a reflexionar qué es lo que tienen que hacer y encontrar sus propias soluciones. Hay que “enseñar a pescar” a las nuevas generaciones, no con conocimientos concretos, sino yendo mucho más allá y haciéndoles pensar, estimulándolos, ayudándoles a ver las cosas objetivamente, a valorar alternativas y a encontrar y escoger una solución.

Además, no me gusta pensar que el éxito de un país dependerá del «Gasto en I+D«, más que de gastos me gusta hablar de desarrollo, nuevos avances en materias de I+D, nuevas investigaciones… No siempre invertir mucho dinero en algo implica grandes resultados.