Hoy leo una noticia en diferentes medios de marketing online sobre las nuevas máquinas de Social Vending de Pepsi, un interesante caso sobre como las marcas están alineando su estrategia de marketing en social media con sus canales offline, para ofrecer mejores servicios o llegar mejor a su público.

Pues bien, Pepsi ha desarrollado estas nuevas máquinas que nos permitirán comprar bebidas de Pepsi, personalizarlas, regalarlas a nuestros amigos e, incluso, grabar un mensaje en vídeo grabado desde la propia máquina. A nuestro amigo le llegará un código que podrá canjear en estas máquinas. Por el momento, se han puesto en marcha varios prototipos en la ciudad de Chicago y están funcionando bastante bien. Veremos si finalmente funciona y llegan a España, o queda como una simple prueba aislada.

Entre estas «Social Vending Machines» y la comunidad de The Pepsi Refresh Project, acción para financiar todas aquellas ideas que intentaran hacer un mundo mejor, parece que Pepsi no tiene miedo a integrar social media en su realidad y, por el momento, la acogida de la comunidad está siendo buena 🙂 (y está adelantándose en este punto clave a Coca Cola).

Hace unos días también me llamaba una noticia sobre como Renault había llevado a la vida real los «Me gusta» de Facebook en el evento AutoRAI Amsterdam Motorshow. Allí, Renault equipó tanto a los coches como a los asistentes con tarjetas de sistema RFID. Esto permitía a todos los asistentes conectarse con sus perfiles de facebook y marcar como «Me gusta» sus coches preferidos.

Desde luego, todos los que creían que las redes sociales se limitan a las pantallas de ordenador, enviar smileys o dar toques virtuales están muy equivocados. Cada vez más, las marcas están intentando captar el valor de las redes sociales en la realidad y crear ese «Internet de las cosas«, en las que tanto personas, como objetos o lugares puedan comunicar información al mundo.

¡Cada vez la frontera entre «mundo virtual» y «mundo real» se hace más estrecha! (si es que aún existe esa diferenciación 😉 )